¿Qué es la vitamina E?
La vitamina E, también conocida como alfa-tocoferol, es una vitamina liposoluble, lo que significa que se mezcla fácilmente con aceites y grasas. Está presente de forma natural en el sebo presente en la superficie de la piel. Se encuentra en grandes cantidades en aceites vegetales como el de aguacate, almendra dulce, oliva y girasol. También está presente en las frutas oleaginosas (nueces, avellanas, almendras) o en frutas y verduras (mango, kiwi, espinacas, pimientos rojos). En los productos cosméticos se suele utilizar un derivado: el acetato de tocoferilo.
Para encontrar la vitamina E en nuestros productos cosméticos, aparece en la lista de ingredientes del envase bajo los nombres de TOCOPHEROL o TOCOPHERYL ACETATE.
¿De dónde proviene?
La vitamina E puede ser de origen sintético o natural. Las fuentes de vitamina E utilizadas en nuestros productos ecológicos están certificadas por la organización ECOCERT
¿Para qué se utiliza?
La vitamina E es conocida por sus beneficios para la salud y se recomienda su consumo regular. Se utiliza en la industria alimentaria como conservante natural para proteger los alimentos de la oxidación.
Además, en cosmética, se utiliza para ayudar a la piel a defenderse de las agresiones externas (rayos UV, contaminantes) beneficiándose de sus propiedades antioxidantes y anticontaminantes.
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Antioxidación
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Anticontaminación
¿Cuáles son sus beneficios?
En los cosméticos, gracias a sus propiedades antioxidantes, la vitamina E protege la fórmula de la oxidación. También reduce la acción de los radicales libres inducidos por los rayos del sol y los contaminantes. Por ello, la vitamina E previene el envejecimiento prematuro de la piel.
En combinación con la vitamina C, se refuerza su acción antioxidante.
La vitamina E también ayuda a reducir la oxidación del sebo en la piel, reforzando así la barrera lipídica de la piel.
Es muy bien tolerado por todo tipo de pieles e incluso por las atópicas.
Los hechos:
- Una revisión bibliográfica[1] explica que la vitamina E se utiliza desde hace más de 50 años en dermatología y en muchos productos cosméticos. En efecto, está científicamente demostrado que la vitamina E es un potente antioxidante. Es capaz de neutralizar el exceso de radicales libres presentes en el organismo debido a los rayos del sol que son responsables del envejecimiento prematuro de la piel.
- Un estudio[2] científico realizado en México demuestra que las condiciones de exposición ambiental, como la contaminación, tienen un impacto significativo en la calidad de la piel. Y este estudio demuestra que la concentración de vitamina E, presente de forma natural en el sebo de la piel, es menor en las personas que viven en Ciudad de México, un lugar expuesto a la contaminación. Por lo tanto, es importante tener aporte regular de vitamina E para compensar esta pérdida.
- Varios estudios[3,4,5,6] han demostrado que la vitamina E tiene un efecto positivo en la oxidación del sebo cuando se expone a la luz solar o en un entorno propenso a la contaminación.
[1] : M.A. Keen & al. Vitamin E in dermatology. Indian Dermatol Online J. 2016 Jul-Aug; 7(4): 311–315
[2] : M.-A. Lefebvre & al. Evaluation of the impact of urban pollution on the quality of skin: a multicentre study in Mexico. International Journal of Cosmetic Science, 2015, 1–10
[3] : Boussouira & D.M. Pham. Squalene and Skin Barrier Function: From Molecular Target to Biomarker of Environmental Exposure. 2016. G.T. Wondrak (ed.), Skin Stress Response Pathways, chapter 2
[4] Thiele & al. Ultraviolet A Induces Generation of Squalene Monohydroperoxide Isomers in Human Sebum and Skin Surface Lipids In Vitro and In Vivo. J Invest Dermatol. 120(6):915-22, (2003)
[5] Thiele JJ & al. Sebaceous gland secretion is a major physiological route of Vitamin E delivery to skin. J Invest Dermatol 113,1006-1010, (1999).
[6] Thiele JJ, Schroeter C, Hsieh SN, Podda M, Packer L. The antioxidant network of the stratum corneum. Curr Probl Dermatol 29, 26-42, (2001).
¿Qué usos tiene en nuestros productos?
Utilizamos la vitamina E en todas nuestras categorías de productos cosméticos por su poder antioxidante. Sirve para proteger nuestras fórmulas que contienen ingredientes sensibles a la oxidación, como las grasas. También permite que nuestras cremas de cuidado de la piel y los productos de protección solar sean verdaderos defensores frente a las agresiones externas (rayos UV y contaminantes).
